Pongamos que haces pasta con vegetales (zanahoria, calabacín, pimiento rojo…) y quieres que te quede perfecta. Sigue estos consejos…
Hierve la pasta, el tiempo de cocción lo marcará la variedad. Escúrrela y añádele una cucharada de salsa de soja Mezcla y reserva. Coge un wok y haz un sofrito con aceite de oliva. Salpimenta y dale caña al fuego sin parar de remover. Cuando la verdura esté tierna, añádele la pasta y un chorrito más de salsa, al gusto. Acaba el plato con unos brotes tiernos de soja y semillas de sésamo. Remueve de nuevo… ¡Y ya está! Salt(e)arás de alegría con el resultado.