¿Ya de vuelta? Seguro que han sido unas estupendas vacaciones. Estupendas y posiblemente un tanto descuidadas, pero ¿acaso serían vacaciones si nos lleváramos la dieta a cuestas? Desde luego que no. Sin embargo, los excesos del verano pasan factura y es tiempo de cuidarse. Ten a mano los siguientes consejos y verás cómo tu cuerpo recupera el tono.
- Toma un vaso de agua tibia con medio limón exprimido en ayunas. Te ayudará a limpiar el organismo.
- Reduce la sal de las comidas (puedes aportar sabor con hierbas y especias) y bebe el litro y medio de agua recomendado al día. Verás cómo tu cuerpo empieza a librarse de todo ese exceso de líquido que ha acumulado.
- Anota en la lista de la compra aliados drenantes y depuradores como el té verde, la piña, la alcachofa, los espárragos o la manzana.
- ¡Desayuna bien! Un kiwi ―te ayudará a mejorar el tránsito―, café, tostada de pan con fibra y un chorrito de aceite de oliva virgen extra. Completo y saludable.
- Y no dejes de hacer cinco comidas al día. A media mañana y media tarde toma una pieza de fruta fresca.
- Cena y come pronto. Tómate tu tiempo, sin distracciones, y mastica bien.
- Opta por menús hipocalóricos, dejando de lado las grasas, con gran peso de verduras y legumbres, que son muy saludables y estupendas para mantener el colesterol a raya. Carnes magras al horno, coloridas ensaladas, pescados al vapor…
- Prepárate un caldo depurativo a base de apio, cebolla y perejil y toma una taza durante unos días antes de la comida y la cena. Ayudará a limpiar el hígado de toxinas.
- Olvida el alcohol y las bebidas carbonatadas
- Y por supuesto, ¡muévete! Ya sabemos que no es nada nuevo, pero es que el mejor de los gestos que puedes hacer por recuperar el tono es combinar la alimentación saludable y una adecuada hidratación con actividad física.
