En una cazuela con el ghee pochamos unos minutos la cebolla junto con los ajos bien picados. Añadimos el jengibre, las lentejas, el chile molido, el masala, el tomate troceado pelado y sal. Se cubre todo con un poco de agua, que lo cubra dos dedos, y cocina a fuego lento removiendo durante un rato.Añade agua según se vaya quedando sin caldo, pero nunca demasiado, es mejor que falte y no que sobre. Remueve hasta que las lentejas se vayan deshaciendo y formando un puré.
** Para clarificar la mantequilla sólo tenemos que ponerla al baño maría, sin que hierva el agua. Si lo pusiéramos sobre el fuego directamente se quemaría.
Cuando se derrita observaremos que se separa una parte acuosa, blanquecina, de la grasa que es totalmente amarilla. En ese momento podemos trasladar la grasa con mucho cuidado a un recipiente intentando no coger nada de la parte blanquecina, que no es más que el suero de la leche.
También podemos sustituirla por nuestro aceite de oliva suave, dándole así al plato un toque más mediterráneo… ¡y más sano!