Una dieta equilibrada es uno de los pilares de una vida saludable. Te recordamos cómo seguirla.
1 – Consume alimentos con todos los tipos de nutrientes (proteínas, carbohidratos y lípidos); sobre todo, frutas, verduras y hortalizas frescas.
2 – Evita el alcohol y el tabaco. ¿¿¿Hace falta explicar por qué???
3 – Reduce los alimentos con mucha sal, con mucho azúcar y/o con grasas saturadas, las malas. Tampoco hace falta decir nada más.
4 – Apúntate al aceite de oliva virgen extra. Contiene ácidos grasos monoinsaturados (ácido oleico), vitamina E (antioxidante), fitosteroles (reducen el colesterol) y compuestos fenólicos (antioxidantes). Son numerosísimos los estudios científicos que avalan sus beneficios para la salud.
5 – Dale a los frutos secos. ¡Lo dice la OMS! Nueces, almendras, avellanas, pistachos… poseen un elevado contenido en proteínas, antioxidantes, fibra, minerales y vitaminas B y E, así como grasas monoinsaturadas y poliinsaturadas, que contribuyen a la disminución del nivel de colesterol LDL, a la reducción de los triglicéridos y a la coagulación de la sangre, y mejoran la salud de los vasos sanguíneos.