¡Llegó la era de las verduras! Si hay una tendencia que en los últimos tiempos despunta en todo el mundo es, precisamente, la de la cocina sana, de proximidad, basada en vegetales de temporada, fresca y ligera. Por este motivo existen mil maneras de tunear nuestras verduras y crear con ellas platos divertidísimos, originales y extremadamente sexis. ¿Has probado a caramelizarlas con vinagre balsámico? Bastará un toquecito para cambiar por completo el sabor de esas verduras que tienes en la nevera y convertirlas en un plato único sensacional, o bien en la guarnición perfecta para cualquier alimento.
¿Cómo hacerlo? Muy fácil. Solo tienes que coger tus verduras troceadas (calabacín, cebolla, pimiento, berenjena, puerro, zanahoria…) y sofreírlas en aceite de oliva virgen extra durante unos minutos en la sartén, hasta que se ablanden. A continuación, añade un chorro de vinagre balsámico de Módena, una cucharada de azúcar y un chorro de agua, reduce el fuego y cocina entre 20 y 30 minutos, hasta que las verduras estén completamente caramelizadas. A partir de ahí, ¡imaginación al poder! Quedarán bien en infinidad de recetas: como topping en una hamburguesa, acompañando a unas legumbres o como guarnición en un pescado, por ejemplo. ¿Te atreves?