¿Compras más comida de la cuenta? ¿Tu factura de la compra sube cada vez más? Te proponemos cinco maneras de ahorrar alimentos y dinero.
1 – Menús semanales. Invertir un poco de tu tiempo en planear un menú semanal te ayudará a redactar una lista de la compra que incluya todo lo que necesitas y nada más. Esto tiene una doble utilidad: no te sobrarán alimentos porque habrás calculado lo que consumirás y ahorrarás porque no comprarás cosas «por si acaso».
2 – Listas de la compra. Van ligadas al primer truco. Si planeas menús semanales y luego preparas una lista consecuente con ellos, notarás el ahorro a partir de la primera semana. Eso sí: si la haces, tendrás que respetarla. Y si se te antoja algo que no está en la lista, apúntalo para la semana siguiente o saca algo que hubieras planeado comer.
3 – Ve a comprar después de comer. Esto te ayudará a reducir los antojos y así podrás ahorrar más. Sobre todo, será más fácil evitar comprar productos precocinados o bollería industrial, que es lo primero que va al carrito de la compra cuando vamos hambrientos al supermercado.
4 – Productos de temporada. Si quieres comprar fresas en diciembre o naranjas en agosto, has de saber que te costarán más que en temporada. Si consigues ceñirte a la época del año propia de cada fruta, verdura u hortaliza, ahorrarás sensiblemente y además comerás más sano.
5 – Nada de procesados. Los productos precocinados suelen ser más caros si los comparamos con los naturales. Pero son toda una tentación, a causa de las grandes cantidades de azúcar y grasas procesadas que normalmente contienen y que son adictivas para el organismo. Para evitar caer en la compra compulsiva, lo mejor es acudir a las tiendas de barrio o a los mercados. En los grandes almacenes estamos sometidos a muchos estímulos visuales que nos distraen de nuestra lista de la compra con la ilusión de hacernos ahorrar tiempo, cuando en realidad estamos gastando mucho más. Y comiendo mucho, muchísimo peor.