¿Te aburre comer las nueces siempre igual? Será porque quieres. Empieza a innovar desde ya, tomándolas de las siguientes formas:
- Ralladitas y al yogur (que sea siempre entero y sin azúcar, nada de postres lácteos). Un toque de copos de avena, coco, fruta troceada y virutas de chocolate y estarás ante un auténtico manjar de dioses.
- De topping en tus cremas de verduras, siempre con un chorrito de aceite de oliva virgen extra. ¡Qué delicia!
- En zumos y smoothies. Unas hojas de menta fresca (¿qué tal si la cultivas en tu balcón y la tienes siempre a mano?) y unas nueces ralladas son mano de santo.
- Con tu surtido de quesos. Déjate de snacks y barritas industriales y merienda un trozo de queso y unas nueces. Nada más saludable, saciante y delicioso.
- En repostería. Ya puedes añadir unas nueces a tu bizcocho y tus tartas, desde el carrot cake hasta la típica tarta de yogur.
- En el pan. ¿Haces panes caseros y aún no te has decidido a tunearlos con nueces? ¿A qué esperas?
- En tu ensalada. De pasta, de arroz, verde, de quinoa, de legumbres… de lo que sea. Lo bueno de las nueces es que siempre quedan bien en este tipo de platos.
