¿Se puede reducir el riesgo de sufrir diabetes? Con la Dieta Mediterránea… ¡sí!
La Dieta Mediterránea reduce el riesgo de sufrir diabetes entre un 18 y un 40%. Ésta es una de las muchas conclusiones a las que han llegado los investigadores después de analizar los resultados del estudio PREDIMED.
PREDIMED es el mayor estudio sobre dieta mediterránea, en el que participaron un total de 7.447 personas de entre 55 y 80 años de edad que, o bien padecían diabetes o bien tenían predisposición a sufrir enfermedades cardiovasculares. Aleatoriamente, a los participantes, se les hizo seguir tres dietas: dieta mediterránea suplementada con aceite de oliva, dieta mediterránea complementada con una mezcla de frutos secos y otra dieta baja en grasas.
Después de 9 años de investigación, el equipo concluyó que aquellos individuos que seguían una dieta mediterránea enriquecida con aceite de oliva virgen extra o frutos secos tenían, respectivamente, un 40% y un 18%, menos de riesgo de sufrir diabetes en comparación con los que habían seguido una dieta baja en grasas.
Además, los pacientes que participaron en el estudio y siguieron la dieta mediterránea disfrutaron de un período más largo antes de necesitar medicamentos para tratar la enfermedad. También, y en comparación con aquellos adscritos a la dieta baja en grasas, muchos de los pacientes con dieta mediterránea experimentaron una remisión en su diabetes.
Al cabo de seis años, todas las personas en el grupo de dieta baja en grasas habían tenido que recurrir a medicamentos para tratar la diabetes. En cambio, no fue hasta los ocho años cuando todas las personas del grupo de dieta mediterránea necesitaron medicación.
La razón es que las grasas que se incluyen en la dieta mediterránea son grasas saludables (aceite de oliva, frutos secos, pescados…) que ayudan a la pérdida de peso y son buenas para el corazón, por lo que eliminarlas de la dieta puede causar problemas.
“En un futuro se deberán revisar las recomendaciones dietéticas”
Esta frase de Jordi Salas Salvadó, experto en nutrición, ilustra que la adopción de un patrón dietético saludable como el mediterráneo es capaz, por sí mismo, de prevenir la diabetes. Esta tesis, desarrollada por los investigadores del estudio PREDIMED a partir de los resultados, modifican por primera vez las actuales recomendaciones internacionales para prevenir o retrasar la diabetes mediante la dieta.
En definitiva, para las personas recientemente diagnosticadas con diabetes tipo 2, tomar una cantidad apropiada de aceite de oliva, pescado y frutos secos ralentiza la progresión de la enfermedad más que la restricción de la grasa.
Un problema de alcance mundial
La diabetes es una enfermedad de elevada prevalencia a nivel mundial. Según la Organización Mundial de la Salud, en las últimas tres décadas la prevalencia de diabetes en el mundo se ha más que duplicado. Existen más de 180 millones de personas diabéticas en todo el mundo y se prevé que estas cifras se dupliquen en 2030 y que, en los próximos 10 años, la mortalidad por diabetes aumente en un 50%.
El estudio sobre la diabetes lo ha llevado a cabo el equipo de Nutrición Humana del Hospital Universitario de Sant Joan de Reus, el Instituto de Investigación Sanitaria Pere i Virgili (IISPV), la Universidad Rovira i Virgili, y el CIBER Obesidad y Nutrición del Instituto de Salud Carlos III, bajo la dirección del Dr. Jordi Salas Salvadó (URV), en colaboración con la red de Atención Primaria del Institut Català de la Salut, que dirige el Dr. Josep Basora.