Corta los calabacines en tiras largas y finas, de unos 3 mm de grosor aproximadamente. Cuécelos en una olla con agua durante un par de minutos, hasta que se ablanden.
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Corta los calabacines en tiras largas y finas, de unos 3 mm de grosor aproximadamente. Cuécelos en una olla con agua durante un par de minutos, hasta que se ablanden.
Pica la cebolla y el ajo y dóralos durante unos minutos en una sartén con aceite de oliva virgen extra. Cuando estén listos, añade el atún, previamente colado y mezclado con un chorrito de vinagre balsámico de Mòdena , y cocínalo todo junto durante un minuto más. Salpimiéntalo.
Coloca las tiras de calabacín en una bandeja, bien estiradas. Pon cuidadosamente un poco de relleno en el centro y ciérralas.
Espolvorea cada ravioli con queso mozzarella y hornéalos durante unos 5 minutos a 180 ºC.